FUENTE: WWW.INTERFERENCIA.CL
Aunque el informe se centra en niños adoptados desde otros países del mundo, éste menciona graves irregularidades en Chile, incluyendo testimonios de miembros de la organización Chilean Adoptees Worldwide. A los hallazgos se suma la “identificación ocasional” de tráfico de menores chilenos, adulteración de documentos, fraude y corrupción.
El reporte publicado por el Comité de Investigación de Adopción Internacional de Holanda (Comissie Onderzoek Interlandelijke Adoptie, en neerlandés) no trata particularmente sobre Chile. Se enfoca en ilegalidades ocurridas en adopciones de niños provenientes de Brasil, Colombia, Bangladesh, Indonesia y Sri Lanka; los países que conforman la mayor porción de los 40 mil adoptados por familias holandesas.
Sin embargo, la investigación emanada del Ministerio de Justicia y Seguridad holandés contiene preocupantes hallazgos sobre los procesos adoptivos desde Chile: según el reporte, está “estructuralmente identificado” el robo de niños desde sus familias biológicas para ser entregados en Holanda.
El documento, publicado en febrero de 2021, establece el periodo entre 1980 y 1989 –en plena dictadura cívico-militar– como el más intenso en términos de adopciones de niños chilenos en Holanda. En aquel lapso Chile entra al “Top 10” de países que más niños recibió el país europeo. (Revise acá el reporte en neerlandés y acá la traducción no oficial de éste).
El gobierno holandés apunta el tráfico de niños; fraude y corrupción; ocultamiento de datos; y falsificación de documentos como abusos “ocasionalmente identificados” en adopciones provenientes de Chile.
Además de identificar como un problema estructural el robo de niños, el gobierno holandés apunta el tráfico de niños; fraude y corrupción; ocultamiento de datos; y falsificación de documentos como abusos “ocasionalmente identificados” en adopciones provenientes de Chile.
Ilegalidades en procesos adoptivos en Holanda
Las conclusiones del Estado holandés se enmarcan en una serie de irregularidades en procesos de adopción de niños chilenos detectados en Europa, los cuales han sido ampliamente cubiertos por medios chilenos y que, desde el 2018, se encuentran siendo investigados por la justicia liderada por el ministro Mario Carroza.
INTERFERENCIA, durante octubre, publicó los hallazgos de la historiadora chilena Karen Alfaro, quien a través de la revisión de documentación diplomática entre Chile y Suecia develó que la dictadura de Pinochet utilizó las adopciones de niños chilenos en el país nórdico para mejorar la imagen del régimen chileno. Para llevar a cabo este esquema, la dictadura se valió de políticos y empresarios nazistas y de partidos de ultraderecha, según informó el medio sueco, Dagens Nyheter. (Revise acá el artículo de este medio).
El pasado lunes, esta redacción publicó los resultados de una profunda investigación sobre adopciones de niños chilenos llevada a cabo por el gobierno de Dinamarca, la cual fue solicitada por la ministra de Asuntos Sociales, Astrid Krag. En ésta se asegura que no es posible descartar la existencia de ilegalidades como la remoción de niños sin autorización de sus padres chilenos y la existencia de incentivos económicos para hacerlo. (Revise acá el artículo).
Para la todas las investigaciones en torno a esta problemática, el testimonio de los propios adoptados ha sido clave, siendo la presión ejercida por estos el motor principal en la búsqueda de una verdad histórica.
El testimonio de miembros de Chilean Adoptees Worldwide
“El hecho de que ahora se preste atención a los abusos del pasado es, principalmente, porque adultos adoptados han comenzado a hablar por sí mismos”, apunta la Investigación de la comisión de adopción internacional de Holanda. Ese es precisamente el trabajo que la organización internacional Chilean Adoptees Worldwide (CAW) ha realizado en los últimos años, formando parte del reporte neerlandés.
Fundado el 2018 por Alejandro Quezada, Angélica Martínez y Jessica Pincheira, CAW intenta conectar a personas adoptadas desde Chile durante la dictadura e inicios del retorno a la democracia con sus familias biológicas, o al menos con la historia detrás de su adopción. Quezada, Martínez y Pincheira fueron adoptados ilegalmente, residiendo la mayor parte de sus vidas en Holanda, Suecia y Bélgica; respectivamente.
Miembros de CAW fueron entrevistados por la Comisión de Adopción Internacional de Holanda, aportando con sus testimonios y documentación para dar cuenta de lo ocurrido en Chile. “Más de 80 países fueron escuchados, y nosotros [Chile] fuimos uno de esos”, explica uno de los fundadores de la organización. Complementa explicando que el hecho de que en Chile se esté conduciendo una investigación judicial para esclarecer las adopciones internacionales “es la razón detrás de que nos hayan incluido y aparezcamos en la tabla disponible en el reporte”.
A pesar de estar mencionados en el reporte holandés, para la directiva de CAW dicha mención es insuficiente. “El hecho de que exista una investigación criminal oficial en torno a los adoptados desde Chile deja en claro que esta situación es más grande que una simple mención en una tabla”, explican.
Miembros de Chilean Adoptees Worldwide participarán el próximo 17 de diciembre del segundo Congreso de la agrupación Hijos y Madres del Silencio, entidad fundada en CHile y aliada de CAW, que busca cumplir con el mismo propósito de conectar a adoptados chilenos con su historia y revelar las ilegalidades cometidas en sus procesos; además de ayudar con el proceso judicial en curso.