Por Fernando Bendeck Inostroza, colaborador de El Indoamericano.

La adolescente es el ícono de una nueva generación de jóvenes palestinos que han cambiado las piedras por las redes sociales que permiten los operadores en Cisjordania.

 

 Ahed Tamimi, que cumplió sus 17 años en prisión en 2017, tras un juicio a puertas cerradas por abofetear a un soldado israelí y luego de su liberación por la resonancia que causó los meses que estuvo en prisión, cambió las cachetadas por declaraciones puesto que ha sido visitada por medios de comunicación, organizaciones humanitarias y diplomáticas. Precisamente fue aquella detención “por desacato a la autoridad militar e incitación a la violencia”, dada a conocer por su madre a través de las redes sociales que permiten los operadores de móviles cisjordanos, las que la hicieron conocida internacionalmente.

Se la ha catalogado como la Juana de Arco de la actual resistencia palestina. La adolescente de melena pelirroja es parte de esta nueva generación que pasó de los enfrentamientos a los teléfonos inteligentes con videos que difunden cada vez que logran registrar abusos de poder. Una suerte de intifada permanente digital.

Ahed proviene de una familia que participó activamente en dos intifadas y ha sido su padre el principal activista en Ramala para la devolución de tierras ocupadas por asentamientos judíos en Nabi Saleh.

En 2015 fue la primera vez en la que alcanzó notoriedad luego de que junto a mujeres y niños del “clan Tamimi” impidió que un soldado israelí detuviera a su hermano pequeño que llevaba un brazo inmovilizado.

Ha sido recibida en Estambul por el presidente Recep Erdogan, asistió a un acto del Parlamento Europeo y participó el año pasado en charlas en Sudáfrica.

Es que la madre la había filmado en una jornada de ira palestina mientras se enfrentaba a soldados israelíes al frente de su casa y al enviarlo a las redes sociales permitió que la justicia presentara las pruebas en su contra.

Los palestinos ven en ella la imagen de un David contra Goliat y la derecha israelí, el partido Lykud, de tendencia nacionalista vio en aquel video una humillación al ejército reflejado en los combos y patadas que recibieron los soldados que la enfrentaban con uniforme y chalecos antibalas.

El viceministro israelí y ex embajador en Estados Unidos, encabezó una investigación en la Knesset o parlamento israelí, para determinar que Ahmed y otros menores son “personajes de ficción” y que los Tamimi serían una familia integrada por “agentes que envían a los menores a enfrentarse escandalosamente a la policía israelí”. Sin embargo la investigación no llegó a conclusión alguna.

Israel no respeta las leyes internacionales

Según un documento que apoya mayoritariamente la Unión Europea, se revela “la sistemática discriminación legal” que sufren los palestinos, principalmente en Cisjordania. Aunque evitaron incluir la palabra apartheid, reconocen que a los palestinos se les aplica por regla común la ley marcial en “tribunales castrenses de Judea y Samaria” regidos por leyes heredadas de tiempos coloniales. Incluso se apoyan en leyes otomanas del siglo X, las que permiten confiscar territorios no cultivados e inglesas que aún les permite decretar detenciones arbitrarias, sin cargos e indefinidas.

Este sería el ambiente en que ha surgido el liderazgo de Tamimi en la nueva resistencia digital.

Fernando Bendeck Inostroza

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