Escrito por Vasili Carrillo Nova
El 7 de febrero se cumplieron 59 años de existencia de la Escuela de Cadetes Interarmas General Antonio Maceo, de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba.
Era diciembre de 1975, con mis 18 años a cuesta llegue al Aeropuerto Jose Marti en la Habana, viaje desde la RDA hasta Cuba, los compañeros Rodrigo Rojas y Millas solo me habían dicho meses antes, que mi misión era aprender a obedecer y mandar, nada más sabia de mi futuro estadía en Cuba, como militante comunista disciplinado y con la convicción de prepararme para luchar contra la dictadura y por un Chile mejor, era en definitiva lo que me motivaba. Es así como ese mismo día desde el Aeropuerto me trasladaron en una “Guaguita” osea en un pequeño autobús, hasta Ceiba del Agua, en donde se encuentran las dependencias del la Escuela Interarmas General Antonio Maceo, a decir verdad pese a no ser fácil llegar y en cosa de horas estar pelado y vestido de verde olivo, pero junto a mis compañeros y hermanos en forma rápida nis fuimos acostumbrando y lógicamente fue vital, por un lado la voluntad y decisión solidaria de Fidel y la Revolución Cubana, al abrir las puertas de esta Escuela y de las FAR, pero también fue muy importante el como nos recibieron los oficiales, cadetes y mandos de la esta Gloriosa Academia. Fueron tres años de estudio y formación política militar, los profesores y profesoras nis entregaban con mucha dedicación y solidaridad sus conocimientos.
Pasaron los años y al regreso en el año 1981 desde Nicaragua, nuevamente regrese a la Escuela General Antonio Maceo, pero en esa ocasión como teniente de las FAR, primero como jefe de compañía de Cadetes y después como profesor de táctica, hasta finales de 1983 cuando me retire y prepare mi retorno a Chile clandestinamente, en ese período como jefe y profesor ayude en la formación de oficiales cubanos y entre ellos algunos nuevos compañeros chilenos, que iniciaban su formacion, al igual que yo y decenas de hermanos en 1975, hoy no solo recuerdo emocionadamente a hermanos como el Edgardo Lagos, el Payo, caído en Nicaragua, como a los hermanos que dieron sus vidas aquí en la lucha contra ls dictadura, como Roberto Nordenflich, Raul Pellegrin, Juan Waldemar Araya, Carlos Godoy Echegoyen, Moises Marilao Pichun, también con el pasar de los años y la magia de las redes sociales, me he reencontrado con compañeros oficiales y cadetes cubanos, como Francisco Alberto Sanchez, Felipe López Del Toro, a quienes recuerdo con mucho cariño y gratitud por todo lo entregado en la Maceo.
Como no olvidar en 1997, para el Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes, después de aquello visite la Escuela Interarmas General Antonio Maceo y una vez más me recibieron con el cariño y aprecio al que están acostumbrados los y las cubanas.
Han transcurrido más de 40 años y si hay algo que atesoro en mi vida, es justamente las enseñanzas técnicas y valoricas que me entregaron en esta academia, que hoy cumple 59 años.
VIVA LA ESCUELA INTERARMAS GENERAL ANTONIO MACEO!!!
VIVA EL PUEBLO Y LA REVOLUCIÓN CUBANA!!!
